Compañeros Erresecianos, inicio aquí mis relatos diarios habituales:
Sábado 22/FEB/25Estábamos convocados al mediodía en una gasolinera en las afueras de
Xerta donde llegamos ¼ de hora antes pero ya había unos cuantos coches, se notaba que había ganas


Poco a poco llegó todo el grupo mientras caían unos gotas que nos obligaban a refugiarnos bajo la marquesina que cobijaba los surtidores. Entonces llego el “pequeñín” del grupo


A las 13:00 comenzó el briefing por parte del roadleader y la entrega de las cartas de bienvenida a los nuevos David
@Daks (no tengo foto), Kiko
@Kiko, Albert
@Z4white y Martín
@unzetaimportado.





Y de aquí partimos para la zona de picnic a muy pocos kilómetros de distancia. Una zona con unas estatuas muy poco elaboradas, pero curiosas

denominadas "Cabeza y Piedra".






Después nos dirigimos también en un trayecto corto al “punto café” con el tiempo cada vez más despejado. Ese tramo lo hicimos detrás de Gali y Malena. Finalmente aparcamos delante de un hotel rodeando una cabeza tractora que no debía esperar tan ilustre compañía





Repostada la dosis de cafeína correspondiente, seguimos ruta en cabeza detrás de José Carlos, Malena y Luis pasando por una zona de aerogeneradores, hasta que paramos para que el líder nos anunciase que iniciaríamos un tramo de unos 9 kms a ritmo “old style” hasta
El Pinell de Brai. He de decir que fue un tramo muy disfrutón pero que se me hizo algo corto.





Aquí un detalle de Gamora con su “Gamorita”


Tomamos unos refrescos en un Pub de El Pinell de Brai de nombre “Piki” Blinders, supongo que versión castiza de Peaky Blinders, la serie de culto sobre una banda criminal de Birmingham. Y después seguimos y tuvimos otro tramo muy ratonero diría que después de pasar
La Fatarella, y retornamos dirección sur hacia
Tortosa y después
L´Ampolla donde estaba nuestro hotel.
Unos entraron al angosto parquing, otros nos fuimos a llenar el depósito y la gasolinera más cercana que era una Avia de lo más cutre, donde las pistolas se atascaban cada dos por tres y José Luis y yo comentamos que a saber que nos habían puesto

. Al día siguiente Gali me comentó que no pudo repostar porque no tenían luz

Como quiera que el hotel después de la cena cerraba el servicio de bar, previamente a esta dimos una vuelta para localizar un bar que si estuviese abierto para tomar algo postcena. Y lo que suele pasar en invierno en estos sitios tan costeros, sólo había una coctelería de nombre Blau Mar. Por tanto cenamos en animada conversación y después algunos nos fuimos para el Blau Mar donde dimos cuenta de algún refresco, una botella de cava, un Bayleys y 4 gin tonics de su propia ginebra.
Y hasta aquí noies i nois mi relato del sábado.
