Cuando allá por el mes de julio,
@ArianMX5 me dijo que el Maño Team estaba organizando una concentración con la madre de todas las rutas, tenía claro que debería asistir. Poco sospechaba que mi condición de “malus” iba a impedir o al menos dificultar mi participación. Pero gracias a la generosidad de los organizadores, he podido disfrutar de un fin de semana increíble.
ViernesLuis y yo llegamos al hotel en Alcañiz sobre las 17:30. Sólo había un roadster en el aparcamiento y coloqué el Boxster al lado para que tuviera compañía en una tarde algo desapacible.
Bajé a tomar algo en la cafetería y me quedé admirado de los posters que adornaban las paredes, tanto por su valor artístico como por las realidades que mostraban- ¡carreras de coches por las calles de Alcañiz!
SábadoDespués de desayunar, me di una vuelta por el aparcamiento que, ahora sí, estaba lleno de roadsters:
Una vez en marcha, me coloqué detrás del Miata de
@Roberto77 Hubo un auténtico despliegue de roadsters azules en el lugar del picnic:
Y, todo solito, el bonito Z4 de
@fmoral :
Otras instantáneas tomadas en el mismo lugar:
DomingoAunque nos avisó Jorge Velvett que nos esperaba una sorpresa, nadie podía imaginar que sería para visitar ese templo de la velocidad que veíamos a través de las ventanas del hotel. Muchísimas gracias, Virginia.
Allí, pudimos contemplar muy de cerca todo tipo de bólidos:
Nuestros roadsters en nuestro aparcamiento particular:
Luego, seguimos camino hacia Cantavieja. Aquí, delante de ArianMX5:
En el pueblo de Cantavieja, donde corría un aire fresquito:
Por fin, en el monumento a la cabra montesa del Silent Route:
En una de las multiples paradas de reagrupamiento:
Llegamos puntualmente al final de la ruta donde disfrutamos de una magnifica comida en grupo.
Mil gracias a todo el Maño Team por una concentración extraordinaria.