BUeno, me iba a dormir, pero no he podido evitar leer esto
Veamos, por partes. Efrén tiene un gran coche, que por si fuera poco todavía esta mejorado, además tiene buenas manos, y por si eso también fuese poco se conoce toda las curvas como si fuese él quien las hubiese asfaltado. Ahora bien, os cuento mi principal temor, el cual estaba bien fundado. Mi propia experiencia me dice que cuando alguien quiere "impresionar" a otro, éste puede arriesgar más de la cuenta con tal de lograr su "objetivo". A efrén no lo conocía por lo que temía que sintiese dicha "obligación" y es por ello por lo que le dije que no era necesario correr para demostrarme nada. El caso es que esto que os cuento lo he vivido en mis propias carnes, con algun propietario de un Z4 3.0 que me pretendía vender el coche cuando yo todavía estaba en busca y captura de uno, y para demostrarme lo mucho y bien que va ese motor, empezó a hacer una serie de barbaridades COMPLETAMENTE INNECESARIAS y adelantamientos casi suicidas. Amén de que, algun amigo mio, por la misma estúpida regla de tres, ha acabado en medio de una rotonda por la misma tontería de intentar demostrar "algo" que todavía no sé el qué.
Claro, esto extrapolalo con un tio, que
en circuito privado lleva un Lotus perreado, anocheciendo, por una carretera estrecha donde solo cabia un coche y muros a ambos lados, el pie a tabla (imaginense en aceleración a -la bestia-), para más inri era en bajada y en su inicio la visibilidad era justa (por no decir mala) debido al cambio de rasante, sumale que la carretera en bajada hacia "eses" y que el chico llevaba neumáticos semis delante y de calle detrás por lo que el juego era "más interesante", recuerden que he dicho que bajaba con el pie a tabla. El mero hecho de pensar el "si se le vá de detrás, por lo que sea, y roza el muro, vamos de parte a parte, tocando todos los muros y a ver como acaba el asunto", a una velocidad endiablada que curva tras curva aumentaba como la espuma hasta llegar abajo donde no me atreví a preguntar que caprichoso número apuntaba la aguja del cuentakms.
Cuando pasabamos por las curvas, no dije nada, estaba impresionado, y me sentía como en el S7. buena aceleracion y paso por curva, zaga jugetona e increibles frenadas. Pero al llegar a esa bajada, claro, ahí tocó el límite de lo racional en mi cerebo y tras pasar las 2 primeras minienlazadas a toda castaña, en plena aceleración y cada vez más rápido, con esos cambios de peso, en mi cabeza sólo pensaba en los diferentes neumáticos del coche y el caprichoso destino, y fué ahí cuando se me escapo un (exactamente dije): "NOOooooo.... paraaaa!!! y luego todo continuo como si nada.
Bueno, veamos, el lotus no tiene NADA para cogerse, las puertas no tienen asa (peso que se ahorra) y añadir que iba con una mano al aire grabando la vuelta. Asi que estaba vendido al cinturon y asiento. Y esto no hizo más uqe reafirmar los pezados de asientos, que no me hizo falta la asa de la puerta, me sujetaban excelentemente y, aunque parecen rígidos (de hecho lo son) tiene una forma anatómica PERFECTA, además de tener un miniacolchado allí donde unicamente es necesario, como debajo del a nuca y en alguna parte del respaldo.
Mañana cuento más, que ahora me caigo de sueño.