Cuando el coche lleva el tratamiento cerámico no soy partidario de poner ningún producto que no sea, en mi caso, el ech2o, que es el Quick Detall específico para la limpieza en seco llevando el tratamiento, nada más, ni algunos QD que llevan algo de cera, ni ceras líquidas, ni duras ni muchísimo menos la cera de una gasolinera, aunque yo diría que esa cera poco efecto hace, por suerte.
El tratamiento cerámico además de proteger la carrocería, tiene otras características, como un alto nivel hidrófugo, la fácil limpieza del coche, mayor resistencia a la suciedad (dura más tiempo limpio en condiciones normales) o un brillo persistente sin necesidad de otros productos.
Si después de poner el cerámico empezamos a ponerle ceras, la única ventaja de la que se disfruta del cerámico es lo que no se ve y no se nota, la protección de la carrocería. Al tener una capa de cera por encima, la capa de cerámico queda oculta y el resto de propiedades como la fácil y rápida limpieza, la capacidad hidrófuga o que dure más tiempo limpio quedan escondidas, porque la superficie se comportará en base a la cera con las propiedades de la cera, no del cerámico. Eso sí, el cerámico me atrevería a decir que durará el doble, porque lo que no se usa no se gasta.
Amén de que si se pone el cerámico y se hace esa inversión de dinero se hace para luego tener las ventajas antes mencionadas durante mínimo dos años, sin tener que gastar dinero en microfibras extras, QD, ceras líquidas ni ceras sólidas, puesto que durante ese tiempo no le hacen falta.
En mi caso, antes cuando utilizaba ceras, a parte de todo el tiempo que tenía que invertir frotando y frotando, cada año gastaba no menos de 5 o 6 botellas de ceras líquidas, otras 5 o 6 de QD’s, medio bote de cera dura y muchísimas microfibras.
Desde que empecé con el cerámico todo eso ha sido sustituido por un bote de QD ech2o el cual se diluye en una parte de producto por 9 de agua, con lo que me dura casi un año entero, y nada más, absolutamente nada más.