Manel, yo soy como tú, me cuesta la improvisación y prefiero tenerlo todo controlado. Pero el mejor consejo que te puedo dar (a tí y a todos los nuevos) es que os dejéis llevar. No hay absolutamente nada en lo que pensar, ni si llegaremos a tal hotel, ni si desayunaremos, ni si habrá paradas para comprar avituallamiento, ni si podremos desayunar/comer/cenar a tiempo, ni si entraremos todos los coches en tal parking, nada. Ya hay alguien que ha pensado todas estas cosas y más. Así que todo irá suave si os dejáis llevar. Be water my friend.
Y en cuanto a las piscinas... ya te confirmo desde aquí que no vas a catar piscina de hotel alguna.
Peeeeero, un bañador y una toalla fina del decathlon no ocupa sitio y quién sabe si se puede dar uno un chapuzón en algún río por el que se pare cerca.
Gracias
@ozelui en lo que me toca.... pero, por cierto, en mi colección de fotos de Tours tengo varias fotos de baños en piscinas, en ríos y en lagos...pero me las voy a reservar...
Lo cierto es que un Tour no es una Concentración y siempre hay un margen para la improvisación así que nunca se puede saber exactamente lo que va a pasar... lo que le da un toque de aventura que una conce tiene en grado bastante más modesto.
Obviamente en un Tour hay que llevar una organización y una planificación para que todo discurra dentro de unos márgenes. Dejar al azar el desarrollo del Tour sería temerario, pero en realidad no creáis que esos márgenes son demasiado estrechos. De hecho, una concentración requiere de una mayor exigencia en la planificación porque no es lo mismo llevar 9 coches en una caravana que llevar 25, en todos los sentidos.
Un grupo pequeño permite un margen de libertad y de improvisación muchísimo mayor para hacer una parada-café, una parada en un punto panorámico, o una parada fisiológica que puede hacerse a demanda y en cualquier momento porque no es demasiado complicado encontrar aparcamiento para el grupo.
Sólo puedo decir que, obviamente, el trabajo de montaje de un Tour (trazados de la ruta, gestión de reservas hoteleras, elaboración de rutómetros, etc.) poco tiene que ver con el de una conce y su complejidad es bastante mayor, pero una vez iniciado el Tour y ya en ruta, yo personalmente voy más relajado que en una conce porque me resulta menos exigente en el control de una serie de cosas para que todo fluya con normalidad, y en realidad es como hacer unas largas vacaciones roadsteras con un grupo de amigos compartiéndolo todo cada día, desde el momento del detallado a primera hora envueltos en el frescor matinal y el trino de pájaros y el posterior y reconfortante desayuno, hasta la hora en la que al final de la jornada caemos rendidos en los brazos de Morfeo con la ilusión de saber que al día siguiente hay más….