Me acuerdo perfectamente.
Era el viernes en vísperas del 6ª Aniversario del Club.
El 4 de diciembre de 2015.
Terratico y yo habíamos viajado por la tarde desde Madrid a Valencia.
Ángel nos había recomendado un hotel situado entre Valencia y el punto de salida y a nuestra llegada, nos fuimos directamente para allá.
Con su hospitalidad habitual, Ángel nos vino a recoger al hotel para hacer una visita guiada por la ciudad de Valencia. Nos fuimos en su coche, un Ford Focus, creo.
Dejamos el coche en un lugar seguro y nos dimos un paseo tranquilo por la parte moderna de la ciudad. Una vez terminado, nos sentamos en una terraza y comenzamos a hablar, cómo no, de los coches.
Por alguna razón, coincidimos los tres en que el nuevo Boxster (el 981) era una preciosidad. Hablamos de que la variante GTS era aún más bonito y en rojo, espectacular. Aunque yo llevaba apenas 18 meses con mi Boxster, también estaba tentado por las formas de ese nuevo modelo.
A mi vuelta a Madrid después del Aniversario, no conseguí quitar ese coche de mi memoria y me puse a buscar Boxster GTS que estaban a la venta. La razón me decía que no tenía sentido comprar otro Boxster, siendo el mío tan nuevo. Solo tenía unos 50.000 km. Pero mi corazón me decía otra cosa.
Así, me hice experto en saber la cotización de los GTS a la venta y estaba al acecho de cualquier ganga que pudiera surgir. Eso incluía también a los Cayman, dado que los precios eran parejos.
Un día, a finales de enero de 2016, ¡Plof!, vi un Cayman GTS a la venta en el concesionario de Madrid a un precio muy atractivo y con todas las garantías. Mi cabeza me decía- una solución perfecta- no tendría que vender el Boxster.
Así que llamé al vendedor para saber si seguía disponible y me fui para allá. El coche era espectacular, en plata con esos contrastes en negro y además muy bien equipado. Primera matriculación en junio de 2014 y solo tenía 17.000 km.
Como había confianza, le pregunté si lo podía probar y nos fuimos a dar una vuelta. Era bastante más cómodo que mi Boxster y mi cabeza me decía que sería ideal como coche de familia (para mi mujer y yo).
Volví para casa y estuve deliberando unos días, siempre con el temor que, a ese precio, no duraría mucho a la venta, pero no quería tomar una decisión precipitada.
Algunos días después, me llamaron para saber si seguía interesado, porque había otros pretendientes y tenía que decidirme.
Me fui para el concesionario otra vez y comenzamos a hablar en serio. Efectué una inspección detallada del coche y decidí tirar para adelante, después de negociar un pequeño descuento.
Firmé el pedido y el viernes 12 de febrero de 2016, recogí mi flamante Porsche Cayman GTS en Plata Rodio metalizado.
Fotos en una salida unos días después:
Sin duda, uno de los coches más bonitos que haya tenido.
Después de tantos años, cada vez que pienso en esta compra, estoy convencido de una cosa:
Ángel y Terrático tenían la culpa.
Continuará.....