Hacía siete días que habíamos salido de Madrid al inicio de nuestro Tour de 12 días por Francia.
En España, hicimos noche en Ayerbe, en la provincia de Huesca y al lado del Castillo de Loarre.
En Francia, habíamos hecho paradas en los pueblos de Luz-Saint Saveur, Villeneuve-de-Rivière, Caunes- Minervois, Aumont-Aubrac et Chabeuil.
Hasta entonces, habíamos disfrutado de un tiempo excepcional, con días soleados y buena temperatura.
Pero, en la mañana del 8 de agosto de 2017, cuando estuvimos desayunando en el hotel de Chabeuil, uno de los dueños nos anunció que el tiempo estaba cambiando y que estaban previstas tormentas en la ruta que íbamos a seguir hacía Saint-Pierre d’Entremont.
Era una pena, porque se trataba seguramente del día más interesante del Tour, dado que íbamos a pasar por Col de la Bataille, Combe- Laval, Pont-en-Royans y Gorges de la Bourne. Pero, no teníamos otra alternativa que seguir hacía nuestro destino, donde teníamos hotel reservado.
Efectivamente, en la subida a Col de Bataille, se puso muy negro y comenzó a llover, además con aparato eléctrico. A medida que ascendíamos, había que conducir con más y más cuidado, dado que pequeñas piedras se habían desprendido de las paredes a nuestra derecha y ocupaban parte de la calzada.
Cuando llegamos al tramo de Combe-Laval, no llovía tanto y pudimos sacar alguna foto. Pero, me impresionó tanto el lugar que decidí grabar un video. Hicimos dos pasadas, una en cada sentido. En la primera, llovía un poco, pero en la segunda, arreció con mucha fuerza. Aún así, no salió tan mal:
Dejamos atrás Combe- Laval, pero la lluvia no cesó y ya no disfrutábamos del viaje. Así que, cuando llegamos al pueblo de Saint-Laurent-en-Royans, decidimos parar. Encontramos un colegio con una gran zona de aparcamiento y “abandonamos” los coches en media del diluvio. Es la foto que he decidido presentar al concurso de este mes: