Como ya sois varios los que habeis pedido sensaciones y diferencias, vamos a ello, aunque aún sea algo pronto.
VENTAJAS DEL Z3:
Sin ningún género de dudas, su "autenticidad" como roadster; cintura baja, mayor transmisión de sensaciones y mucho más con la suspensión B12 que llevo puesta, y ese poso a clásico que ya atesora sin ninguna duda el BMW Z3. El motor 2.8 empuja mucho y probablemente enseña mucho antes lo que empuja al ser un chasis más antiguo y una tecnología de una generación atrás.
VENTAJAS DEL BOXSTER.
Aunque todavía me falta mucho para cogerle confianza, sin duda alguna el confort de marcha y el aislamiento aerodinámico en marcha, la ausencia de inercias en curva que te permite circular más rápido sin ser consciente de ello ( ese puede llegar a ser el problema jajaja).
El cambio PDK es una verdadera gozada por su rapidez de acción, y eso que aún no le he cogido todo el tranquillo. Las marchas se engranan de forma ágil y en curva, las reducciones ayudan mucho sin tener que jugar con el freno.
Obviamente es un vehículo de otra generación que el Z3 y de otro nivel de acabados y se nota.
Los dos maleteros son un factor indudable en nuestro caso a la hora de hacer los largos viajes de verano por Europa, y han sido un componente en la toma de decisión.
FACTORES EQUIPARABLES DE AMBOS.
Algo importante para mí es el sonido del motor sin necesidad de cambios de escapes, etc... y desde ese punto de vista, tanto el motor 6 cilindros de BMW como el Boxster de Porsche tienen un sonido en aceleración realmente bonito y agradable de oir, lo que empuja en muchas ocasiones a apagar la música y disfrutar del sonido del motor.
En conclusión, creo que tengo el privilegio de disfrutar de dos coches totalmente diferentes pero que me han y me van a ofrecer sensaciones y experiencias de disfrute de auténtico lujo, y por supuesto, muchas serán en compañía de los socios de esta casa.