Etapa 17. Mis impresiones con algunas imágenesLlegamos a la última etapa del Tour, que comenzaba en la Alta Provenza a los pies del Mont Ventoux y finalizaba en la aldea de Gincla, próxima a la parte más oriental de los Pirineos, siguiendo la etapa el desarrollo que aparece en siguiente mapa general de la misma.
En esta última etapa la meteo se aliaba una vez más con nosotros regalándonos otra espléndida jornada de verano con pleno sol y temperaturas agradables; un escenario pues perfecto para afrontar la recta final de la aventura que tan intensamente habíamos vivido y que durante tantos días nos había transportado a un escenario muy distinto al de nuestras rutinas cotidianas.
La etapa comenzaba con nuestro desayuno provenzal en la terraza del hotel La Garance, situado en la aldea de Sainte Colombe justo al comienzo de la ruta de subida al Mont Ventoux por su vertiente Sur.
Uno poco después comenzábamos el recorrido con un tramo de primera clase: la ruta completa del Mont Ventoux, que en esta mañana haríamos en sentido contrario al realizado en la tarde anterior con 37 km de puro placer de conducción para cualquier amante de las carreteras de montaña.
Aquí tenemos a Ángel afrontando con su Boxster el último tramo de la vertiente Sur del Ventoux, muy cerca ya de la cima.
Hemos llegado arriba y se impone ahora un rato de descanso para disfrutar del lugar y hacer una visita a la tienda de recuerdos.
Como podemos ver en las dos fotografías siguientes, la visibilidad de aquella mañana de agosto era realmente muy buena y permitía disfrutar del paisaje en muchísimos kilómetros de extensión, con un excelso fondo de escenario con la silueta de los Alpes franceses recortada en el horizonte
Ya en la bajada por la vertiente Norte del Ventoux llegó el momento de un descanso-café en el “Chalet Liotard” en donde también otros Tours anteriores habían recalado; lo cierto es que hay puntos de parada que son ya un clásico en estos viajes y se recuerdan de un año para otro.
Poco después afrontábamos un largo tramo de autopista con el que nos situamos en las proximidades de la ciudad de Narbonne, para desde allí poner rumbo a la comarca de las Corbières situada al Norte de los Pirineos orientales; por allí ruteamos en una buena parte de la tarde siguiendo pequeñas carreteras que atravesaban agraciados paisajes. La foto siguiente en una parada café a media tarde en el pueblo de Termes.
Nuestra buena amiga Lorena disfrutanto de un “Perrier cassis”.
Algo más tarde, muy cerca ya del final de la etapa, recorríamos la singular y sorprendente garganta de Galamus.
Un poco después llegábamos al hotel de fin de etapa en donde tuvimos la última cena de este Tour.
El final del Roadster Tour 2018Estábamos en la jornada 18 y llegaba el final de la aventura. En aquella mañana de finales de agosto flotaba en el ambiente una mezcla de satisfacción, sabedores de que habíamos alcanzado una meta, y también de melancolía porque poníamos el punto final al Tour que durante tantos meses habíamos esperado con anhelo; quizá podamos intuir en las caras de los participantes esa mezcla de sentimientos cuando desayunábamos en la “Hostellerie du Grand Duc”.
Un poco después, justo antes de despedirnos, el amable propietario del hotel nos hacía una última foto al grupo de participantes.
El Roadster Tour RSC 2018 llegaba a su fin tras 17 etapas intensamente vividas en la mejor compañía que me habían aportado un buen conglomerado de emociones y muchos momentos inolvidables.
Siempre que un Tour se culmina, en mi viaje de vuelta a la realidad suelo conducir sin música, sin radio, y con la única compañía de los recuerdos y pensamientos vinculados a la aventura que acaba de terminar, y envuelto en esas sensaciones siempre me interrogo a mí mismo acerca de si podré ser partícipe de un nuevo Tour en una próxima edición.
Miles de gracias a todos los seguidores de este hilo y, de forma muy especial, a los participantes del Tour 2018 por poner tanto de su parte para que todo fluyese maravillosamente; sin ellos no habría sido posible.