Apuntes sobre el hotel de la Etapa 6 y su entorno. En la sexta etapa del Tour comenzamos el recorrido en las alturas del parque natural de Vercors, para descender hacia Grenoble siguiendo la ruta de la garganta de Engins; vendrá después un largo tramo atravesando interesantes zonas del macizo alpino de la Chartreuse, entre ellas la garganta de Guiers Mort, el Col du Cucheron y la garganta del Guiers Vif, bordearemos el lago de Aiguebelette y más tarde rutearemos siguiendo una pequeña carretera con vistas en altitud sobre el lago de Aix les Bains, icluyendo este recorrido la casi segura visita a la Abadía medieval de Hautecombe, emplazada en un bonito lugar al borde del lago.
Seguimos después ruteando hacia el Norte por pequeñas carreteras, y como curiosidad decir que los últimos 30 km de la etapa repiten itinerario con la que fue también la sexta etapa del pasado Tour 2017, con un tramo final que recorre el hermoso valle de Valserine y el premio especial, ya llegando al hotel, de un divertido tramo de subida para acanzar las altas mesetas del Jura, y allí entre praderas y paisajes bucólicos nos espera un hotel ya muy conocido en los Tours:
Le Pré Fillet.
Nos situamos en el lugar de emplazamiento de este hotel con el último mapa de los incluidos en el rutómetro para esta sexta etapa:
Será la tercera vez que un Tour RSC visite
“Le Pré Fillet”, lo hizo en 2016 y en 2017 y repetirá de nuevo en 2018.
Que un hotel se repita en un Tour responde, o bien a su ubicación especial, o a que ha dejado un especial buen recuerdo; pues bien, en
Le Pré Fillet se dan ambas condiciones: está situado en un bonito y tranquilo lugar a 1.260 m de altitud en las altas praderas del Jura, sus instalaciones son agradables y acogedoras, su personal es amable, se come estupendamente, y finalmente tiene un precio razonable.
El hotel está instalado en el edificio de lo que antaño era una vieja granja del Jura, en el que la familia Grosrey en sus últimas 3 generaciones ha ido realizando sucesivas reformas hasta convertirlo en un lugar confortable en el que Patrick, Marie-Noëlle y sus hijas acogen gustosos a sus huéspedes.
La ubicación del hotel es perfecta para disfrutar en verano del aire puro, de la calma de los grandes espacios, de la fauna y de la diversidad de la flora, y del esquí de fondo y de los paseos en trineo en los meses de invierno.
Con 15 habitaciones de ambiente rústico de montaña, un amplio comedor con vistas panorámicas a los verdes pastos del Alto Jura en verano y al blanco tapiz de la nieve en invierno, una sala de desayunos orientada al sol naciente, y equipamientos complementarios como sala de lectura, bar con chimenea, sala de juegos infantiles y un pequeño espacio relax con sauna y jacuzzi, este hotelillo es un buen lugar para hacer un alto en el camino y pasar una de las noches del próximo Tour 2018.
Además, a la hora de sentarnos a la mesa podremos degustar una cocina tradicional, sabrosa y generosa a la vez.
Y siguen ya unas fotos para ilustrar un poco a
Le Pre FilletEl hotel en el bonito entorno en el que se encuentra ubicado
Foto nostálgica en el año 1968
La imagen actual del hotel
El comedor con vistas a la campiña
En una buena comida francesa que se precie no puede faltar una tabla de quesos antes de servir el postre
Una de las habitaciones
Sus amables propietarios, Patrick y Marie-Noëlle
Y unas foto recuerdo del paso por este hotel del Tour del pasado año 2017, en la que los propietarios del hotel se fotografiaron con el grupo.
Una última curiosidad. Este hotel acoge con relativa frecuencia concentraciones o rallyes de coches; la última muy recientemente hace unos días ha sido
"La Pequeña Siberiana" del Club.911.net con unas fotos de su paso por Le Pré Fillet.
Si queréis echar un vistazo a la página web del hotel, es ésta:
http://www.hotel-leprefillet.com/