Pasear por las calles del pueblo, en principio, no tiene por qué conllevar sorpresa alguna. Pero hay excepciones, como la del murciano Juan Pedro, un joven que, el pasado agosto, con 16 años (ahora tiene 17), fue multado por un guardia civil por circular de forma incorrecta. Hasta aquí nada anormal. Si se comete una falta, se recibe una sanción. Pero en esto no están muy de acuerdo ni el joven ni su padre, que la semana pasada recibieron la notificación de la multa con sorpresa. El castigo a Juan Pedro por circular en una vía de doble sentido, sin señalizar, en un carril de Beniaján (Murcia), ha sido una multa de 500 euros y la retirada de seis puntos del carné de conducir que aún no posee, pues es menor.
Todo se remonta al 4 de agosto, cuando Juan Pedro iba en bici. Un agente le dio el alto y le comunicó que iba a denunciarlo por circular en sentido contrario, pero al joven "no se le dio ningún papel", explica su padre. Hace una semana llegó la notificación del ayuntamiento de Murcia de dicha sanción al domicilio. La denuncia la interpuso un agente, pero al no tener competencias para su tramitación, se traslada al departamento de Sanciones del Ayuntamiento. Para el padre de Juan Pedro es una multa "desproporcionada". "No digo que mi hijo estuviera circulando de manera correcta, pero no creo que se trate de una falta tan grave", se lamenta. La retirada de puntos será efectiva cuando el joven obtenga el permiso de conducir.
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