Tras varios rescates millonarios a las carreteras de peaje, las medidas que tantas veces se han planteado desde muchos medios, incluído el presente, van pasando con cuentagotas bajo la lupa del Gobierno. Para hacer viable una carretera de peaje, solo hay una manera y esa es que de verdad merezca la pena el pago por circular por ella.
Ya sea por ahorros de tiempo importantes, un tráfico más fluido o unas carreteras anchas y bien cuidadas, las carreteras de peaje han de ser atractivas y en la actualidad no lo son. En marzo el ministro de Interior puso sobre la mesa la idea que ahora el Gobierno ha presentado de forma oficial para elevar el límite de velocidad de las autopistas de peaje hasta los 140 km/h. Esta proposición no de ley se ha llevado al Congreso para que se estudie la medida en la Comisión de Seguridad Vial.
El propio diputado que ha presentado la propuesta, Paco Vañó sufrió un accidente que lo dejó parapléjico, pero cree que esta medida no implicará riesgos adicionales a los conductores. La velocidad de 140 km/h no es la que indica la propuesta, si no que es la que el PP ha coincidido en determinar como segura a la vez que incitará a un mayor uso de las carreteras de peaje al ser un 16,6% superior a la máxima actual de 120 km/h.
Aún así todavía quedan muchos flecos de las carreteras de peaje que habría que cortar, como por ejemplo los abusivos precios de algunas carreteras de peaje, las prórrogas ad eternum de concesiones más que amortizadas o la sobreprotección del negocio de las concesionarias. Carreteras con poco potencial, sobreprotegidas y a precios abusivos, lo normal es que quiebren.
Si el proyecto sigue adelante, las autopistas normales se quedarán en 120 km/h, lo que incita a pensar si resulta que los límites se ajustan a las circunstancias coche/vía actuales y no se han quedado ya obsoletos. No solo hay buenas carreteras en la red de autopistas de peaje, en la pública también y personalmente creo que no se debería subir únicamente el límite de las autopistas de peaje.
No solamente me estoy refiriendo a subir la velocidad máxima en las autopistas gratuitas, creo que habría que dar un repaso completo a todas las carreteras para adecuar las velocidades máximas al estado real y trazado de las vías. No solo conozco autopistas donde se podría circular más rápido de 120 sin problemas, también conozco alguna carretera donde el circular acercándonos por debajo al límite de velocidad o bajo determinadas circunstancias meteorológicas es una auténtica temeridad.
Propongo un límite de 130 km/h para las autopistas públicas, 140 o 150 km/h para las carreteras de peaje y una revisión general de los límites de las vías más importantes, siempre y cuando se pueda mantener la siniestralidad a raya. Límites de velocidad y carreteras de peaje, esto promete movimiento, así que comentad con moderación.