Me ha llamado la comercial de Orange y me ha explicado que el problema es que para que ella le entre en objetivos y yo se le considere cliente suyo tiene que haber fidelización con permanencia, sino no se le cuenta: eh voila! bueno, creo que al menos ha sido sincera, o lo ha parecido
Vaya mentirosos de mierda. Me da igual que lo haga ella "pobrecita" porque es su trabajo, y si no, no le dan comisión.
Mentir a alguien a la cara es una falta de respeto, si no me respetan como cliente, se pueden ir a la mierda.
QUIERO PROBAR SER LIBRE DE UNA PUTA VEZ.
Ya verás qué bien sienta. Cuando seas libre, ya no querrás volver a atraparte ni loco. Sentirás aquello de "el cliente manda" otra vez.
Es increible el atrofiado concepto de fidelizacion que tienen las compañías de moviles: TENER A UN CLIENTE ATADO PARA DARLE POR CULO HASTA REVENTAR!
Espero que sea en sentido figurado, no literal
El problema que tengo es que yo tengo dos lineas fijas asignadas a movil, es decir, las lineas fijas ya no existen sino que son virtuales y cuando llaman al fijo salta automaticamente desde el operador - no desde mi centrallita - a un numero movil. La portabilidad de un número así no es como la de un número movil, pues hay que portar un número fijo virtual y por ejemplo, según me han dicho los de Pepephone, eso no lo hacen ellos, ellos sólo hacen portabilidades de números moviles.
Y no podrías cambiar de números?
Cuál es el problema, que tienes clientes fidelizados que llamarán a esos fijos si o si?
Quizá haya una forma de solucionar esto... no sé, contratando líneas fijas de telefónica con esos números, y que tengan el desvío de llamada activada, dirigiéndolo a números de móvil pepephone.
El coste de una línea fija es de 14 euros al mes. Si no se realizan llamadas desde esos fijos, y se usan sólo para el desvio de esas llamadas, puede que pagar esos 14 euros más la factura de pepephone sea más barato que mantener móviles orange.
Una opción sería portar estos fijos a Orange y los otros a Pepephone.
Para mi orange estaría muerto como cliente, por mentirme.
A mentir a su puta madre, hombre!
La última vez que una empresa de la que compré un producto, me mintió, decidí no comprarles nada durante un periodo de 10 años. Fue en 2004, así que todavía sigo sin comprarles nada, y seguiré así hasta 2014.