el que compró el Bugatti , tiene un museo en California de coches , y la mejor colección de Bugattis del mundo , por eso
lo expone como está , contando la historia de como callo al lago .
COpio y pego:
El comprador resultó ser el estadounidense Peter Mullin, que exhibe en su museo de Los Ángeles una completa colección de coches clásicos franceses (se dice que es la mejor del mundo en cuanto a Bugatti). Según ha transmitido la casa de subastas, Mullin no tiene intención de restaurar el Bugatti y lo mostrará tal y como está en su fundación.
El coche, fabricado en 1925, fue a parar al lago en 1936. Hay varias teorías al respecto, pero la más aceptada es que fue incautado a su propietario, un arquitecto de origen polaco, por el impago de las tasas de aduana que le correspondía abonar después de haberlo importado de Francia. Al parecer, las autoridades helvéticas sujetaron el coche a una cadena y lo sumergieron en el lago a la espera de que el dueño pagase lo que debía, una práctica que debía ser común en la época en las comarcas fronterizas suizas. El arquitecto se resignó a quedarse sin Bugatti, la cadena terminó deshaciéndose y el deportivo se hundió en lo más profundo del Maggiore.