Tengo una compañera de trabajo que su hermana vive en Lorca, a 100 km de Roquetas.
Dice que con el segundo terremoto salieron corriendo de casa, y que cuando llegaron al portal empezaron a estallar los espejos del portal y las losas de las paredes... algo increible, vamos... y se asustaron tanto que cogieron el coche y se han venido hasta Roquetas a casa de su hermana, con los niños y todo.