El piloto norteamericano Scott Speed pasó sin pena ni gloria por la Fórmula 1, pero hay más vida en la competición de las cuatro ruedas, y una prueba de ello es la NASCAR norteamericana, uno de los eventos automovilísticos más populares y mediáticos al otro lado del charco. Y como de obtener rentabilidad mediática y publicitaria en Red Bull Racing entienden mucho, la nueva idea de la empresa ha sido poner el vehículo de Speed con dorsal número 82 a disposición de los ciudadanos de Chicago, como transporte público.
¿Qué puede pasar de esta unión de un piloto, un coche de competición y los logos de Red Bull por las calles de una gran ciudad? Pues espectáculo, originalidad y muchos cuellos girándose al paso del coche de la NASCAR convertido temporalmente en taxi. No se puede esperar confort o un plácido viaje a tope de maletas, pero estoy seguro que a muchos de nosotros nos encantaría montarnos en el taxi por puro placer, el transporte en sí mismo y el destino sería lo de menos.
No es el primer caso de un taxi de lo más curioso y pintoresco, ahí tenemos los casos del Porsche Taxamera, un Panamera Turbo reconvertido en taxi, o del BMW M5 Taxi, ideal para darse una vuelta como pasajero por el circuito de Nürburgring. Sin embargo este caso llama la atención por ser un verdadero coche de competición circulando por las calles públicas de una gran ciudad (¿dónde están las homologaciones?) luciendo el cartelito de taxi.
Como probablemente nunca podremos circular por las calles de Chicago en él con Scott Speed a su volante, al menos el siguiente vídeo deja constancia de la rareza. No faltan en él los drifts y el espectáculo mientras el taxímetro no deja de correr.
http://www.diariomotor.com/2010/09/20/un-taxi-de-la-nascar-por-las-calles-de-chicago/