CORSARIO
Nos habíamos quedado con la copla de cierta, o bastante incluso, ineptitud por parte del muro de Ferrari. Sin querer quitar hierro a parte del trabajo estratégico del equipo italiano, la actuación, de nuevo, de Charlie Whiting es claramente parcial y digna de una investigación profunda por parte de la FIA.
Pasemos muy rápidamente por los hechos que conocemos. Todo parte de la más que buena maniobra de Alonso sobre Kubica. Le coge el exterior y el polaco, defendiendo su posición muy al límite o pasándose en la curva, obliga a Alonso a irse por la hierba. Hasta ayer lo que sabíamos es que Whiting le había dicho a Ferrari, inmediatamente, que devolviera la posición. En Ferrari no dijeron esta boca es mía y todos cargamos tintas contra el muro italiano. El silencio ‘rosso’ nos había hecho asumir aquello del que calla otorga. Y no es así. El que calla, calla simplemente.
NUEVAS REVELACIONES
Pero ayer Ferrari, creo en parte acertadamente, soltó una bomba de profundidad al submarino de Whiting, que tanto daño le está haciendo, relatando exactamente lo ocurrido.
Máximo Rivola, Jefe de Equipo de Ferrari, desveló como se fueron produciendo los hechos minuto a minuto. Sin mayor intención de clarificar las cosas, faltaría más.
La diferencia principal, y muy sustanciosa con la versión dada por Whiting, es que cuando 1segundos después de producirse el adelantamiento Rivola llama a Whiting, éste responde 11 segundos después. Rivola pregunta y
26 segundos desde el adelantamiento Whiting dice que necesita tiempo para ver la repetición.
Al no recibir respuesta Ferrari vuelve a llamar, casi dos minutos después del adelantamiento. En ese momento y no inmediatamente, como defendía el tergiversador de Whiting, es cuando éste corsario indecente al servicio de su Majestad depuesta, dice que cree que Ferrari debería devolver la posición. Ferrari pregunta si es esa la decisión y Whiting contesta que no pero que es así como lo vemos. Kubica ya está en ese momento perdiendo tiempo.
Dos minutos y diecisiete segundos después del adelantamiento Ferrari llamador tercera vez haciendo notar que Kubica no está detrás de Alonso y que éste ya ha pasado a dos coches más.
Catorce minutos y veintiséis segundos después aparece el cartel de que están investigando a Alonso. 55 después del anuncio Alonso es penalizado.
Todo esto cambia totalmente la perspectiva del hecho. Desde la desproporcionada sanción hasta la lentitud exasperante de los Verdegays de turno, parece que más pendientes de una buena agua de malta que de lo que ocurre en la pista.
En cualquier caso el máximo responsable es el mayor grano en el culo que tiene Todt para terminar de romper con el pasado de la gran desgracia que supuso Mosley. Charlie Whiting sigue poniendo a la F1 a los pies de los caballos. Podría ser acusado con facilidad de ser él y no los infractores el que echa una palada de tierra, o varias, cada carrera, con sus decisiones.
Sé de buena fuente que Mosley le dejó muy bien blindado y que echarle supondría una cantidad de dinero astronómica a la FIA. Así estamos en este antro de piratas. Y no nos engañemos. Por mucha película y mucho mito de Robin Hood que tengan no dejan de ser unos ladrones impíos que pasaban, o eran pasados, a cuchillo.
Va siendo hora ya, a la vista de estos hechos, de que Todt saque su sable y, aunque le perdone la vida, le destierre a una isla desierta donde como mucho Whiting pueda hacerse una balsa miserable con cocoteros. Si allí quiere izar su bandera pirata, todo para él. Sigo insistiendo en que es necesaria una postura de fuerza por parte de Ferrari, y quien quiera secundar a los italianos, y plantarse.
Mientras sigo ese tipo indeseable al mando de los GP, no corremos. Total, para que te pongan el culo como la bandera de Japón es mejor quedarse en casa.
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