Parecía que al Smart no le hacía falta frenar para tomar las curvas, simplemente las tomaba. Pensaba que esas cosas solo se podían hacer con un Lotus Elise, un Seven o algo parecido ¿Eso es un coche o un kart?.
Esto viene a ser un reflejo casi exacto de lo que yo pensé cuando probé el Smart con Clubman (y creo que por parte de la misma ruta de esa conce).
La sensación de coger las curvas "sin tener que frenar" nada o muy poco... no tiene precio. La dirección, algo menos directa que de un MX5, pero igualmente muy directa, me encantó, sobretodo en plena curva, cuando más se nota que no es asistida. Además, la aceleración, en revoluciones altas, yo diría que es mejor que la de un MX5 1.8, aunque quizá sólo fuese "sensación de velocidad".
Cronómetro en mano, no sé cómo será. Pero para disfrutar... a mi es lo que más me ha gustado hasta ahora. La sensación es realmente parecida a un kart...