A finales de mayo, tuve la ocasión de pilotar una máquina impresionante en prestaciones llamada: SLK R172 55 AMG. Fue a raiz de la insistencia de mi gran amigo Miguel Rubiera de Soto del Barco (Asturias). Vencí mi apatía y me encaminé hacia Adarsa-Gijon. Y ahí estaban 6 AMG de todo tipo, me decidí por el único
Sport que era el citado, los demás auténticos barcos veleros mucha potencia, E 63 AMG. CLS AMG y los pequeñitos con motor Renault y tracción delantera (menuda máquina!). Los técnicos de Mercedes fliparon, cuando decidí probar solamente el SLK 55 AMG y se preguntaban como pegarse una panzada de Km., y probar uno parecido al mio...Parecido efectivamente. El aspecto exterior e interior bastante anodino (llantas, aleron tipo "gitano", asientos convencionales...). En el momento de arrancar, noté la suspensión extremadamente blanda, pero a medida que iba acelerando dicha suspensión se adaptaba a las exigencias del pilotaje, dando una nobleza y seguridad alucinante. No había color, llevaba delante un E 63 AMG y lo tenía chungo para despegarse de mi y el que me precedía, un CLA AMG en dos virajes desapareció de mi espejo retrovisor. En fin, fue una gozada pilotar un pura sangre, claro está un V 8 de 5,4 litros dando un estratosférico par, 420 caballos y un peso de 1.400 Kg., pues es una máquina a tener en cuenta.....
