El famoso periodista británico hizo una demostración de p’a chulo yo comprándose un coche de la marca que ya no se los deja para pruebas, un Ferrari 599 GTB. Al principio creía poderlo mantener, pero la cruda realidad es que su sueldo no da para tanto y se ha tenido que deshacer de él.
En una misiva publicada en PistonHeads, Chris parafrasea a Jack Nicholson: “¿Quieres la verdad? ¡No puedes asumir la verdad!”. Así ha sido.
Harris se ha ventilado 10.000 libras esterlinas en 10 meses (~1.170 euros al mes) y ha recorrido 3.000 millas (menos de 5.000 km). Una auténtica ruina.El coste ha sido por lo tanto de casi 2,3 euros por kilómetro. Sé que muchos estáis soñando con tener un Ferrari, pero este ejemplo debería haceros a muchos recapacitar. Harris ya lo ha hecho. Se lo compró atraído por su depreciación en el mercado de segunda mano, pero
no deja de ser un sediento V12 italiano que hay que mantener.[ Invalid YouTube link ]
Para mantener la garantía, ha tenido que gastarse un dineral en mantenimiento en un concesionario oficial.
Aquí Ferrari se ha vengado del periodista como hay que hacerlo, con el plato servido bien frío. Además, hay que asegurarlo, el cambio de ruedas es un problema de cuatro cifras, se ha depreciado más, etc.
Si tenéis un nivel de inglés muy bueno, os recomiendo leer la historia completa, pero con nivel de instituto igual se os atraganta.
El consumo dice que nunca le bajó de 20 l/100 km. Que sí, que es un Ferrari, pero eso es excesivo para el bolsillo de una persona de clase media.
Apenas ha movido el coche, 500 km al mes de media es muy poquito. La verdad es que entiendo (salvando las distancias) su problema, tengo también un trasto que requiere cuidados y se mueve poco, y los kilómetros salen caros. Pero el tiempo que lo tienes lo disfrutas, hasta que haces matemáticas.
Que le quiten lo bailao. Para algo ganamos el dinero. Dice que no se arrepiente, ni de comprarlo, ni de venderlo.